domingo, 7 de julio de 2013

Distancia futbolística nos separa del mundo

Manuel Guerra Pérez

La selección de fútbol de Cuba culmino su discreta participación en la XIX edición del Campeonato Mundial de Fútbol Sub-20 que se celebra en Turquía. 

El once antillano que por primera vez acude a un mundial de fútbol en esta categoría, a donde acudieron 24 selecciones de las seis confederaciones afiliadas a la FIFA,  estuvo enrolado en el grupo B junto a las escuadras de Corea del Sur, Nigeria y Portugal, en el cual no pudo obtener punto alguno  al caer derrotado en el primer encuentro 1-2 ante Corea del Sur, equipo que estuvieron derrotando 1-0 en el primer tiempo, para luego sucumbir en partidos posteriores frente a Nigeria 0-3 y Portugal 0-5, este subcampeón del anterior Mundial Sub-20 de la disciplina.

La escuadra antillana una de las dos debutantes en el torneo  junto al equipo de  El Salvador, estuvo comandada por el Director Técnico (DT), Raúl González Triana, quien mantuvo el estilo de juego que caracteriza a este técnico, poco toque de balón y pases a profundidad con un solo delantero centro lo que se tradujo a que sus pupilos tuvieran el récor negativo de un 1 gol a favor y 10 en contra,  situación de juego que se vio incapaz de poner en peligro a los equipos de mayor jerarquía que enfrentaron los antillanos, el DT cubano también llevo las riendas del equipo de fútbol de mayores en los últimos años con reprobables resultados.

Los topes de preparación del once cubano fueron muy escasos para enfrentar un torneo de nivel mundial como este, donde aparecen jugadores que forman parte de los mejores clubes del mundo, eso se vio demostrado en cada partido que participaron, la poca mentalidad técnico-táctica, una defensa mal colocada y sin experiencia de juego al propiciar tres penaltis en sus tres partidos efectuados y sobrepasada con facilidad por los atacantes contrarios, muestran a claras las lagunas y falta de juego de esta inexperta  selección.

El haber clasificado para este mundial Sub-20 fue todo un merito para estos jóvenes ya que lo hacen por primera vez y dejando en el camino a selecciones con más tradición futbolísticas del área, pero esto no se debe ver como todo lo que podían hacer, ya que si fueron capases de clasificar para este mundial sub-20, las autoridades locales deberían darle  más espacio al fútbol traduciéndolo en inversión y topes con equipos foráneos y que los jugadores de  una vez y por todas logren lo que tanto desean, poder jugar en ligas extranjeras para poder desarrollarse.

El futbol es un deporte globalizado y que ha tenido un gran repunte de aficionados en la isla en la última década, y compitiendo en audiencia con el beisbol que es el deporte nacional.

Cuba estuvo en el Mundial de Francia 1938, como país invitado, pero clasifico para el Mundial Sub-17 en 1989 que se celebro en Escocia, y en el de Italia 1991 en la misma.


guerraperezmanuel@yahoo.com
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